Expertos han confirmado lo que más se temía, y que ha circulado por redes sociales estos últimos días: que todo lo que ha pasado con el clima y la geología del planeta o son fenómenos fabricados, o son señales inequívocas que la biblia ya decía acerca del fin del mundo.
Personas tan confiables como tu tía la persinada o tu amigo el que usa gorritos de papel aluminio se han vuelto locos de la emoción porque al fin les hacen caso unos expertos, los cuales aseguran que ciertas vagas coincidencias en la Biblia son predicciones (interpretadas después del suceso, como debe ser) inequívocas, y que además, antes esto NO pasaba.
Así es, los expertos afirman que antes de que la humanidad tuviera acceso a tecnología como HAARP y otras, en toda la Tierra el clima era estable, el sol brillaba radiante, alegres chubascos caían sin inundar absolutamente nada y a su paso, las florecitas crecían y los conejitos brincaban alegremente. La buena Tierra o Pachamama no se movía nadita de nada porque estaba casi virgen y casta, poco tocada por las manos del ser humano, y eso de las tormentas y huracanes era algo desconocido por los humanos pre-capitalistas que vivían en un estado casi de inocencia, en una edad de oro donde la vida humana se cuantificaba en siglos y no en décadas.
La redacción de este medio supone que quizás desastres naturales tales como el sismo de 1985, las erupciones de volcanes tan recientes como El Chichón y el Paricutín, y las erupciones de supervolcanes en tiempos remotos, a saber, el Tambora y el Krakatoa, son recuerdos implantados por la malvada tecnología Rothchild-gris-reptil-illuminati-catoli-sion-priísta en nuestras mentes, para hacernos creer que esto no es nuevo.
Por cierto, los expertos encargados de difundir esta valiosa información, revelaron ser expertos en hacer cupcakes de los Minions, así como expertos en memes pues se chutan unos momazos bien chidos en las redes sociales, esto por si se preguntaban si eran expertos en ciencias o en algo afín.
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