Al ver Trump que por redes sociales los mexicanos invitan a sus compatriotas a no consumir nada de origen estadounidense, y sí de origen mexicano, decidió hacer un movimiento que él considera estratégico: patentar la comida mexicana, y de paso, otras en otras partes del mundo.
"Para los que se sienten mexicanos muy patriotas, ahora que sepan que la patente de los tacos, tlacoyos, quesadillas, pozole y demás es gringa, a ver qué tragan, muajajajaja", dijo, rematando con risa de villano.
Indica que tratará de patentar todas las comidas típicas de todo el mundo, así como aspectos culturales, sociales, y demás (que sean convenientes para los EUA y les duelan a los otros países) para que TODO lo significativo en el mundo sea propiedad de los EUA, y que en todo el mundo les paguen regalías y "América sea grande de nuevo".
Mientras, se han reportado casos de explosiones de cerebro en fervientes patriotas mexicanos que insisten en consumir "solamente lo de aquí", sin importar que haya tenido su origen en otro país, o que sea de origen mestizo, o incluso recién inventado o asimilado de la cultura global.
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