El Chavo del Ocho es, sin duda, una de las series cómicas número uno de la televisión humorística, además de ser dirigida por Enrique Segoviano. Pero el día de hoy nos hemos enterado de una noticia terrible, la cual destruyó nuestras infancias y seguro hará lo mismo con la tuya: esos actores que interpretaban a los pequeñuelos de la Vecindad, es decir, El Chavo, La Chilindrina, Quico, Ñoño, Chabelo, Pepito y Danna Paola, no eran niños: eran señores arrugados y con peleas en la coliseo.
Y es que existe un efecto psicológico llamado "efecto Mandela", en la que el cerebro de varias personas creen recordar sucesos que nunca sucedieron, o creen recordarlos de una forma muy distinta a como en verdad pasaron; esto es, mucha gente cree acordarse de que Nelson Mandela se murió en la cárcel en los ochentas, cuando en realidad sigue vivo y haciendo películas bajo el seudónimo de Morgan Freeman.
Y así con el Chavo: millones de sus fans afirman y aseguran que los actores eran niños muy profesionales, aunque un poco creciditos, pero niños al final de cuentas, que tuvieron, como si fuera una maldición, trágicas muertes, siendo el que interpretaba al Chavo el que ha fallecido más recientemente.
Sin embargo, un equipo de expertos, liderados por el Capitán Obvio, han desmentido este falso recuerdo colectivo, y afirman con pruebas en la mano, close-ups a las caras de los personajes, y actas de nacimiento, que los actores que interpretaban a los niños de la vecindad eran unos SEÑORES, sí, ya personas cuarentonas a las cuales se les aprecia el sudor bien cañón en la frente, en parte por el esfuerzo físico que supone hacer comedia "slapstick", y en parte por los potentes reflectores del estudio de TV.
Se espera que muchas personas, después de leer esta noticia, entren en una etapa de negación que pueda desembocar en un suicidio con galletas de animalitos.
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